Dir. Catrano Catrani
1963 – 16mm.
La acción comienza con una escena extraordinaria, en la que el Chacho Peñaloza comienza a perder su autoridad tras tomar una decisión posiblemente fatal. Poco después el caudillo dispersa su tropa y el film sigue, en episodios cruzados, los destinos de algunos de esos hombres. Casi no hay diálogos en el film. Lo esencial sobre los anhelos y contradicciones de los protagonistas aparece en concisos monólogos interiores ilustrados por cuerpos y rostros de suficiente elocuencia. En su búsqueda de una verdad interior, en el estallido de toda convención clásica y sobre todo en su voluntad de abordar explícitamente nuestros desgarros fundacionales, Catrani se puso a contramano de la representación histórica en todo el cine argentino previo. (Fernando Martín Peña)